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La Fundació de Persones amb Discapacitat de Menorca realizará el servicio de información y control de acceso a las playas vírgenes. Con la adjudicación, por parte del Consell, del servicio a esta entidad, que ha obtenido la máxima puntuación posible en el procedimiento abierto de licitación, se obtiene un triple beneficio. En primer lugar, se facilita la inserción sociolaboral de un colectivo vulnerable en el marco de las políticas activas de ocupación y que en estos momentos de profunda crisis tiene una mayor dificultad para incorporarse al mercado de trabajo. Por otra parte, la Fundació recibe una inyección de dinero, 45.194 euros, que ayudará a paliar parte de las dificultades económicas por las que atraviesa. Y, finalmente, la institución insular logra un importante ahorro de casi 89.000 euros respecto al coste que esta prestación supuso el pasado año y que realizó Tragsa.

De esta manera, y dejando de lado el tema puramente económico, la contratación de la Fundació de Discapacitats supone un loable ejercicio de sensibilidad hacia las personas afectadas por una discapacidad. Un hecho que desde las distintas administraciones, y también del sector privado, no debe perderse de vista para favorecer la cohesión social y la igualdad de oportunidades.