Editorial29/12/24 4:00
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Pese a las expectativas que se habían generado, el coche eléctrico no arranca en Balears. Durante el 2024, la venta de estos vehículos ha caído casi en un 20 por ciento, lo que supone el descenso más acusado en España, solo superado por Aragón. En cambio, el modelo híbrido funciona: las ventas han subido un 32 por ciento y triplica a los eléctricos. ¿Cuáles son los motivos del fracaso de los coches eléctricos? Quizás el más importante es que, a pesar de las ayudas del Gobierno, la mayoría de modelos son muy caros. Otro problema consiste en que la red de carga en el Archipiélago no es suficiente y supone un problema para la movilidad.

No debería serlo porque los trayectos en las Islas son limitados. Solo cabe esperar que en 2025 la industria automovilística lance ofertas tentadoras, que atraigan a más compradores. Es la única manera de contener una caída que parece imparable y que supondría un duro revés a las perspectivas de reconversión eléctrica que ha marcado la Unión Europea para los próximos años. En Balears, la flota de coches tiene una edad media de 14 años, señal evidente de su envejecimiento. Los vehículos diésel también viven sus horas más bajas, con un pronunciado hundimiento del 34 por ciento en ventas. Ese vacío debería ocuparlo el coche eléctrico, pero las dudas sobre su futuro y aceptación cada vez son mayores.