19/07/23 4:00
El sistema de recogida de residuos puerta a puerta, aprobado por el anterior equipo de gobierno del Consell, que se aplica en los municipios de Ciutadella, Ferreries y Sant Lluís, se ha convertido en una fuente de problemas y quejas. Donde se registra un mayor malestar es en el municipio de Poniente, lo que ha llevado a la alcaldesa Juana Mari Pons a exigir medidas urgentes al Consell, de quien depende el Consorci de Residus de Menorca, para acabar con las deficiencias y el malestar que está ocasionando. Pero el Consell tiene las manos atadas por el contrato que suscribió la institución insular durante el anterior mandato con la UTE Menorca Selectiva, a la que adjudicó la recogida selectiva.