Maó la mar de bruta. Este puede ser el nuevo eslogan del Ayuntamiento de Mahón si en un mes, el domingo 15 de septiembre tal y como refleja el calendario de implantación de la recogida porta a porta, se pone en marcha en los barrios de Sínia Costabella, Sínia Morera, Molí des Pla, Andrea Doria y Fort de l'Eau. Un sistema que debería haberse puesto en marcha antes de las elecciones municipales del año pasado, pero con el fin de evitar una campaña electoral «marejada» nadie tuvo el valor y valentía de activar hasta el pasado 13 de noviembre.
Antes de las elecciones, el sistema porta a porta iba a ser una auténtica revolución para conseguir el objetivo y cumplir con la normativa europea Directiva (UE) 2018/851, que establece nuevos objetivos de reciclado de residuos municipales: para 2025, tiene que reciclarse un mínimo del 55 % de los residuos municipales en peso. Este objetivo ascenderá al 65 % para 2035. No niego que, ante la baja tasa de reciclaje con el sistema anterior al PaP (Porta a Porta) que aún sigue en 6 de los 8 municipios de la isla y barrios con mayor densidad de Mahón, se tengan que dar más pasos hacia esos objetivos. Un 20 % (cifra que se recicla sin el PaP) es claramente insuficiente y Menorca, como isla Reserva de la Biosfera no se puede quedar impasible ante esta situación.
El problema llega cuando desde las instituciones, los que decidieron poner en marcha este sistema, pasan del blanco al negro. Sin una escala de grises ni un punto medio que permita echarse atrás si esto no funciona. De repente queremos ser más papistas que el Papa y se opta por no tener en cuenta idiosincrasia de los barrios de Mahón. No es lo mismo el centro histórico que la zona de Ses Vinyes o Avinguda Menorca o Fort de l'Eeau. Ni Sant Climent, Cala Llonga, Sa Mesquida, Es Canutells, Es Murtar o Es Grau.
El alcalde de Mahón, Héctor Pons, al que no se le ha vuelto a escuchar hablar de este tema desde noviembre, creo que debe dar muchas más explicaciones y responder a tres preguntas que son clave. 1. ¿Cómo prevé aplicar este sistema en los barrios con más vecinos en bloques de pisos? 2. ¿Qué criterio aplicará para bonificar la tasa de residuos que acordó el pleno municipal? 3. ¿Cuándo dejará de tomar medidas a posteriori y se adelantará a los hechos que provocan la no aceptación de este sistema entre la población?
Imagino que su principal argumento será decir que el sistema funciona allá dónde se ha puesto en marcha a excepción de unas pocas incidencias. Supongamos que compro este argumento… ¿qué me dice de las imágenes de las áreas de captación del puerto en las que no se puede ni entrar por la acumulación de basura? ¿Y de los cubos que salen volando con una tramontanada como por ejemplo en Malbúger? ¿O de las aceras estrechas con los cubos obstaculizando el paso?
Otro punto a su favor es que se puede probar que se recicla el 80 % del total de residuos que recogen tras el PaP. Esa cifra tengo que reconocer que esta francamente bien, pero usted verá como incluso se supera lo que la UE pide para dentro de… ¡10 años!
Señor alcalde, permítame decirle que antes de que apliquen el sistema a los barrios que anteriormente comentaba, debería pedir al Consorcio de Residuos del Consell un stop y pensar alternativas viables. Por favor, paren este despropósito para convertirlo en algo realmente atractivo y en el que la gente quiera sumarse voluntariamente con beneficios reales para el ciudadano. Escuche a los colectivos (que me consta que le han hecho llegar su malestar) y acuerde con el Consell Insular la paralización del contrato de recogida de residuos para evitar que la ciudad esté més bruta que mai.