Emocionante camino a Tipperary

En el centro del relato está Saorsie, a la que vemos crecer desde la infancia hasta la maternidad. Desde bien pronto su vida parece marcada por la fatalidad. Pocos días después de su nacimiento falleció su padre al colisionar su coche con el camión de la lechería que invadió el carril contrario a toda velocidad en la única curva que había entre la ciudad y el pueblo.

Contada en capítulos muy breves de solo dos páginas de extensión, tal como si fueran relatos breves, nuestra siguiente noticia de Saorsie es la de su primer recuerdo de cuando tenía cuatro años, o tal vez acababa de cumplir cinco. Alguien le estaba haciendo una foto y ella estaba debajo del cerezo japonés de la granja en la que vivía su madre, que estaba casi siempre acompañada por la abuela paterna de la niña.

Las tres mujeres son alegres, fuertes e independientes. Apenas tienen trato con hombres y cuando encuentran alguno la relación no acaba de funcionar.

Ambientada en el condado de Tipperary, en la Irlanda rural y tradicional, La reina del islote de Tierra plantea cuestiones completamente contemporáneas. Asuntos como la soledad, el suicidio, la enfermedad mental o la traición atraviesan las páginas de la novela. Algunos episodios de la vida adolescente de Saorsie aportan luz al lector por su verismo y penetración psicológica sobre una etapa vital en la que es muy difícil no seguir la corriente grupal.

El libro de Ronal Ryan nos propone un camino a Tipperary que no es largo, como el de la antigua y conocida canción británica de Music Hall, sino emocionante, lleno de aventuras y vivencias.

La reina del Islote de Tierra

Donal Ryan

Traducción de Ana Crespo

Sajalín editores

254 páginas