El acusado de los dos delitos de maltrato cumplía prisión preventiva y aceptó la condena en el juicio de ayer, por videoconferencia. | M.J.U.

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Entre ayer y hoy debía salir de la prisión de Menorca un hombre español, de 34 años de edad, que este mismo martes ha sido condenado a 15 meses y un día de prisión por dos delitos de maltrato hacia la que era su pareja, cometidos en Ciutadella los días 21 y 24 de abril del presente año.

El juicio celebrado en el Juzgado Penal de Maó concluyó con la conformidad de la acusación y la defensa, representadas por los letrados, Luis Serena y José de Juan López, respectivamente, y el fiscal.

Aunque la acusación particular solicitaba una condena de cinco años de prisión por la suma de los dos delitos, mientras el fiscal lo dejaba en dos años, se tuvieron en cuenta los atenuantes de reparación de daños y pago de las costas antes de la vista. El acusado, que cumplía prisión preventiva desde su detención el pasado mes de abril, había consignado los 200 euros de indemnización a la víctima por las lesiones que le causó en el segundo de los episodios de violencia de género que había cometido contra ella tras una discusión. La mujer precisó asistencia médica por múltiples magulladuras en el cuello y en ambos brazos.

En el juicio, el acusado aceptó la condena en su declaración por videoconferencia desde la prisión. Se le imponen seis meses por el primer delito y nueve meses y un día de prisión, por el otro, además de una orden de alejamiento a no menos de 150 metros de la mujer y prohibición de contactar con ella durante tres años.

En el mismo acto el abogado del reo pidió y consiguió la suspensión de la ejecución de la condena lo que facilita su inmediata puesta en libertad considerando, además, que estaba recluido desde hace casi cinco meses.

El letrado de la acusación no se opuso a esta suspensión de la pena privativa de libertad ni a que salga de la cárcel de inmediato, y tampoco lo hizo fiscal, aunque precisó que el plazo sin delinquir a riesgo de volver a la cárcel en caso de hacerlo se alargue durante los próximos tres años, tal y como le advirtió el magistrado-juez, Antonio Fernández-Montells una vez hubo dictado sentencia.