Las palmeras que se han retirado estaban muertas por la plaga del picudo rojo.

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Medio centenar de palmeras afectadas por la plaga del picudo rojo han sido retiradas en las últimas semanas en Maó. El Ayuntamiento ha llevado a cabo esta medida después de aplicar a los ejemplares infectados diferentes tratamientos para evitar su tala y no ser posible su recuperación.

La retirada de las palmeras, ya muertas, que ejecuta la empresa Poda de Palmeras Menorca, supone una inversión municipal de 5.000 euros. Explican desde el Consistorio que quitar las palmeras infectadas es necesario por motivos de seguridad, puesto que podrían caer.

Algunas de las ubicaciones en las que se encontraban los ejemplares eran la Costa de Ses Voltes, Es Freginal, la plaça Esplanada y el polígono industrial.