El punto de atención a las víctimas de violencia sexual abrió el pasado 31 de diciembre. | Gemma Andreu

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Diáfano, luminoso, céntrico, amable y destinado a asistir a víctimas de actos deleznables como todos los relacionados con la violencia sexual. Así es el nuevo centro de crisis 24 horas en Maó, en plena vía de ronda, acondicionado con financiación de los fondos europeos Next Generation y que da cumplimiento a la Ley Orgánica 10/2022 de Garantía Integral de la Libertad Sexual. En Balears de momento hay dos, el Centre Libertas en Palma y el Centre Veronique en Menorca.

Este centro atenderá a cualquier víctima de violencia sexual, independientemente del género u  orientación y de que la violencia se haya producido ahora o en tiempo anterior, ya que su objetivo es garantizar la libertad sexual de las personas. Es lo que los expertos y profesionales que tratan con víctimas de abusos y delitos sexuales llaman la ‘denuncia demorada’ que también se atenderá en el Centre Veronique.

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El centro está situado en plena vía de ronda.

«El delito sexual es difícil de reconocer y de contar, muchas veces existe vergüenza y ha habido revictimización por parte de la sociedad e incluso de las administraciones por no haberlo tratado con la sensibilidad necesaria, aunque es verdad que ahora estamos cambiando la tendencia», explica el director insular de Atención Social,  Daniel García del Mar.

Tanto el juez y ahora director insular como la jefa de servicio del Centre Assessor de la Dona (CAD), Victòria Coll, confían en que el nuevo recurso asistencial ayude a «todas las víctimas que han callado» y que estas puedan recibir atención especializada, porque «el primer paso para curarse es contarlo», subrayan. Pero eso en ocasiones no sucede hasta pasados años.

Violencia sexual contra menores

Se estima que la violencia sexual contra menores afecta en Europa a uno de cada cinco niños, esto incluye los tocamientos, la violación, el acoso sexual, el estupro, el exhibicionismo, la explotación en la prostitución y la pornografía, la violencia sexual en línea y el chantaje sexual, según el observatorio Human Rights Channel de la Comisión Europea, y entre el 70 y el 85 por ciento de los niños conocen a sus agresores, eran supuestamente personas en las que creían poder confiar.

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«Es violencia sexual ocurrida dentro de su familia y denunciar a un padre o a un tío, a ese niño o niña le va a costar una barbaridad», apunta García, por eso el tiempo no condiciona esa petición de «ayuda incondicional» que se presta en estos centros de crisis.

El propio Código Penal, cuando habla de la prescripción de los delitos sexuales pone unos plazos muy amplios, que empiezan a contar cuando la víctima ha cumplido 35 años, pero «de hecho se está buscando su imprescriptibilidad», señala García, quien fue juez en Ciutadella con funciones exclusivas en materia de violencia de género. En este sentido, en noviembre de 2024 el Congreso aprobó la toma en consideración de una proposición sobre la imprescriptibilidad de delitos sexuales contra menores, lo que supondría reformar el Código Penal para que delitos de pederastia, por ejemplo, no prescriban nunca.

Equipo

La denuncia por la vía penal es algo que deberán decidir las víctimas que acudan al servicio, «no es una obligación, es un derecho y exige fortaleza», pero el centro les enseñará el camino y tendrán asesoramiento legal además de apoyo psicológico y social para «empezar a sanar a la persona».

Esa ayuda llegará de la mano de un equipo formado por cuatro profesionales procedentes del ámbito de la psicología, el campo legal, el trabajo social y la educación social. El protocolo de actuación del centro de crisis 24 horas ha sido elaborado con la colaboración de todos los servicios implicados en atender casos de violencia machista, como son el IB-Salut, emergencias 112, Policía Nacional, Guardia Civil, el Instituto Balear de la Mujer (IB Dona), la oficina de atención a las víctimas de los juzgados y el propio Centre Veronique.

Unificar servicios

Otro proyecto para este 2025, avanza García del Mar, es que el local contiguo al centro de crisis contra la violencia sexual albergue la futura sede del Centre Assessor de la Dona, para dar una atención integral. «Quiero unir a todos los técnicos que atienden la violencia machista, de género y sexual, en un mismo espacio», explica el director insular de Atención Social, quien destaca que el Centre Veronique cuenta además con un recurso habitacional vinculado, un piso, para acoger de manera transitoria a aquellas víctimas de violencia sexual que lo necesiten.

Por otro lado, aunque es con la ley del ‘solo sí es sí’ cuando se establece la creación de estos centros de crisis 24 horas, que pasan a ser servicios esenciales, Victòria Coll recuerda que el Centre de la Dona ya atiende a las mujeres que acuden por sufrir violencia machista y que también mantiene hasta ahora un convenio con la Fundación RANA para atender en la Isla casos de violencia sexual y las secuelas que arrastran personas adultas cuando los han sufrido en la infancia; no obstante, con el espacio que ya funciona en Maó se evitará «importar esos servicios» o tener que viajar a Palma para recibir ayuda especializada.

El apunte

Polémica entre Igualdad y Podemos por la apertura de los 53 centros

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha afirmado que ya están abiertos 53 centros de crisis 24 horas para víctimas de violencia sexual y avisa de que desde su departamento estarán «muy vigilantes» para que funcionen «a pleno rendimiento». Sin embargo, Podemos ha acusado al Ministerio de dar información «falsa» sobre la apertura de los centros. La exministra y eurodiputada Irene Montero pide al departamento que dirige la socialista Ana Redondo que dé información «real y veraz». «Dar información falsa a las víctimas es negligente», indicó Montero en la red social X. El Ministerio ha reconocido después que está abierto el grueso de los centros, pero no todos.