Entrada al edificio de Cós de Gràcia en el que se aloja la Residencia Geriátrica Asistida. | Gemma Andreu

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Tras las quejas de los trabajadores de la Residencia Geriátrica Asistida de Maó, verbalizadas mediante dos cartas al director de este diario en menos de una semana, el Ayuntamiento anuncia ahora la incorporación de 18 auxiliares sociosanitarios a partir del día 1 de enero, para acabar con la falta de personal en planta. Estas anexiones se producen en el marco del plan piloto que lleva preparando el Consistorio desde el mes de mayo, para aumentar la plantilla y ofrecer contratos más duraderos.

«Nuestro objetivo es reducir la carga de trabajo de los empleados, por lo que añadimos más personal para que se puedan cuadrar las vacaciones de forma correcta, a la vez que ofrecemos contratos más largos y duraderos», explica el regidor de Atención a las Personas, Enric Mas. De esta manera, el concejal admite los problemas para «encontrar profesionales» que el Ayuntamiento llevaba arrastrando desde hace varios meses. Según los trabajadores del geriátrico municipal, existen problemas de organización a la hora de cubrir las bajas. En palabras de los mismos empleados, la falta de personal es tan evidente que se sienten «desbordados» a la hora de otorgar un «servicio de mínima calidad».

Contratos hasta mayo de 2027

Este aluvión de nuevos auxiliares sociosanitarios llega asegurando su permanencia hasta mayo de 2027, huyendo así de los contratos temporales de apenas seis meses. «No es lo mismo ofrecer contratos de corta duración, que contratos estables de dos años o dos años y medio. Esto nos permite no tener que acudir cada dos por tres al mercado laboral y que a veces no podamos encontrar gente para cubrir bajas o vacaciones», indica Enric Mas.

En este sentido, hace una semana y antes de cerrar el año 2024, ya se adhirieron a la plantilla un fisioterapeuta y un encargado del servicio de lavandería. «Ahora tenemos ese margen de personal para no tener que estar pendientes, de hoy para mañana, de contratar a alguien y que el mercado no nos pueda ofrecer a nadie, ya sea porque las bolsas de trabajo estén agotadas o porque una persona no quiera cubrir una vacante de una sola semana», argumenta el teniente de alcalde de Atención a las Personas.

Con esta medida, desde el Consistorio confían en solventar de una vez por todas el problema de falta de personal. Previendo más incorporaciones el próximo mes de febrero, se espera que el geriátrico cuente con una plantilla aproximada de cien trabajadores.

A partir de febrero llegan más camareros, ayudantes de cocina y personal de lavandería

Los 18 profesionales sociosanitarios no serán las únicas caras nuevas del geriátrico municipal de Maó. Enric Mas ha confirmado que en febrero también se sumarán más trabajadores para completar otras áreas de la plantilla. «Faltarían por incorporarse cuatro ayudantes de cocina, cinco camareros, dos encargados del personal de lavandería y otro fisioterapeuta», señala el concejal.

Durante los próximos días, el Ayuntamiento acabará de concretar la selección del personal a través de las bolsas de trabajo disponibles. «En principio no debería haber problema, por lo que ya pasaríamos a centrarnos más en la reorganización de los turnos y la rotación del personal para mejorar el servicio. Si hay más efectivos por planta, se reduce la carga de trabajo y se ofrece una mayor estabilidad laboral», revela Mas.