La actividad económica se ha reducido al mínimo, aunque no se ha paralizado, en las zonas industruales de la Isla | Gemma Andreu

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Despejadas las primeras dudas burocráticas, entre el jueves y el viernes se han presentado los primeros expedientes de regulación temporal de empleo ante la Dirección General de Trabajo y Ocupación Laboral. La cifra de los que se presentarán en las próximas semanas rondará los 300, según cálculos que manejan sindicatos, patronales y gestores administrativos. PIME ha atendido 850 consultas en cuatro días y UGT y CCOO rondan cifras parecidas, lo que da una idea de la preocupación socioeconómica existente.

La cifra de trabajadores afectados se dispara de entrada hasta los 9.000. Los primeros ERTE presentados corresponden a pequeños negocios de entre uno y cinco empleados. Se trata de comercios minoristas, empresas de alojamiento, bares y restaurantes, que son los obligados a cesar en su actividad mientras dure el estado de alarma.

Esos tres segmentos dan empleo en temporada baja a 6.070 personas y casi todas ellas se verán inmersas en esos expedientes. A ellos se añadirán los ERTE que presentarán otras empresas cuya actividad está directamente relacionada con el sector turístico o comercial. Saben que al menos en un mes no tendrán actividad y recurrirán a esta fórmula.

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La incertidumbre que pesa sobre la temporada turística y su repercusión directa e indirecta en el empleo agrega volumen a los números que se están manejando. Un representante sindical, intentando ser realista, cifraba el volumen de afectados entre 9.000 y 10.000. Va a ser «una sangría», comentaba un gestor administrativo, quien, como ambos sindicatos, admite verse desbordado durante estas jornadas.

El conseller balear de Trabajo, Iago Negueruela, y la directora general de su departamento Virginia Abraham celebraron el jueves un encuentro telemático con los sectores que realizan la tramitación de ERTE (gestores y graduados sociales, entre ellos) para marcar directrices, hasta dónde puede aplicarse la causa de fuerza mayor. La situación es compleja y hasta la propia Conselleria está desbordada, señalaba ayer uno de los participantes en este encuentro.

Un empresario hotelero, por su parte, matiza el problema, se trata de expedientes temporales, aunque añade que en mayo puede haber más ERTE por causas también de fuerza mayor por falta de actividad.