En el Moll de Llevant es mayor la presencia de residentes y restaurantes, y menor la de locales de ocio nocturno. | Gemma Andreu

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El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Maó somete el jueves a consideración del pleno una modificación de la ordenanza municipal de ruidos, cuya principal novedad es que el puerto se divide en dos tramos, pasando uno de ellos a ser considerado zona residencial en lugar de zona portuaria. Esto supone, como principal efecto práctico, una reducción de los horarios máximos permitidos a los locales de ocio nocturno del Moll de Llevant.

La concejala Maria Membrive comenta que la propuesta se incluye en una preceptiva, por ley, revisión de la ordenanza municipal, pero que «no está nada cerrado, ponemos el tema sobre la mesa». Cabe señalar que el pleno abordará la aprobación inicial de la revisión de esta y otra ordenanza (precisamente la de horarios de establecimientos), por lo que luego se someterá a exposición pública, alegaciones y redactado definitivo. De momento, pero, ya se incluye esta nueva zonificación del puerto que diferencia los dos muelles.

Membrive explica que la medida se plantea a petición de vecinos de la zona, puesto que en el Moll de Llevant hay un importante número de residentes, algo que no sucede en el Moll de Ponent, un tramo más centrado en el negocio del ocio y la restauración. De hecho, en los últimos meses se ha experimentado el regreso de la actividad de ocio nocturno a este punto de la ciudad, donde la ordenanza actual permite cerrar más tarde al considerar que las molestias que se generan son mucho menores.

Los locales de ocio nocturno de la zona residencial, la mayor parte de la ciudad, pueden abrir hasta las 4 de la madrugada en inverno y hasta las 5 en verano, los viernes, sábados y vísperas de festivos. En el caso de la zona portuaria, así como la considerada industrial, la hora máxima de cierre para estos locales es las 6 de la madrugada todo el año.