Los niños y niñas participantes disfrutaron de una mañana de lo más divertida gracias a una intensa «batalla» de espuma que resultó muy refrescante | Josep Bagur Gomila
Las fiestas de Sant Martí tocan ya a su fin en Es Mercadal. Tras un fin de semana en el que caballos y jinetes fueron los principales protagonistas de la celebración, el pueblo vivió ayer una jornada diferente, pero no menos divertida si se lo preguntan a los vecinos más jóvenes del municipio. Un buen número de ellos pudieron ver cómo el patio del colegio CP Mare de Déu del Toro se teñía completamente de blanco en pleno mes de julio. Y la culpa fue de una nueva edición de una fiesta que goza de gran popularidad entre los más pequeños, la de la espuma. Así, los niños y niñas mayores de siete años lo pasaron en grande bailando y revolcándose entre la espuma cuando el sol comenzaba ya apretar, en torno al mediodía. Los menores de esa edad también pudieron disfrutar de la blanca fiesta, eso sí, acompañados siempre por algún adulto.
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