La consellera Salomé Cabrera - Archivo

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El gobierno del Consell replicó ayer a la organización ecologista GOB y recordó que el proyecto de mejora de la carretera general entre Maó y Alaior cumple las prescripciones de la Comisión Balear de Medio Ambiente.

A través de su portavoz, la consellera Salomé Cabrera, el Ejecutivo de la institución subrayó que el departamento de Movilidad y Proyectos cumple la ley y acata lo establecido por el órgano competente de velar por el paisaje, que es la Comisión de Medio Ambiente.

«No es posible que una parte mande sobre el todo», señaló Cabrera, ya que «de los diecisiete técnicos que dictaminaron sobre este proyecto, solo uno se pronunció en contra».

Para el gobierno del PP el informe final de la Comisión es claro y autoriza el proyecto, con la condición de suprimir el enlace del Camí de Loreto y de reducir las dimensiones de las rotondas.

Cabrera recordó que las dos prescripciones se han cumplido, ya que se ha reducido un 10 por ciento el impacto de los enlaces y un 35 por ciento la ocupación de las rotondas.

Además, recuerda que PSOE y PSM cuando gobernaban «no tuvieron ningún miramiento en traspasar una montaña, construir dos macrorotondas y habilitar un vial alternativo en la variante de Ferreries, y ahora hablan de impacto ambiental.

Se ve que cuando gobiernan ellos no hay impacto y cuando lo hace el PP sí, no tienen vergüenza», remachó la portavoz.