De las diecinueve Áreas de Reconversión Territorial (ART) que establece el Plan Territorial Insular (PTI) siete verán desbloqueados algunos crecimientos que hasta ahora no habían podido ejecutarse, siempre a petición de los propios ayuntamientos en los que se ubican dichas zonas, afirmó ayer el conseller de Ordenación Territorial, Cristóbal Huguet, quien avanzó que la prórroga para la elaboración de la norma se solicitará a través de una proposición a la Mesa del Parlament.
Además de esas siete áreas, está también la transformación de las antiguas baterías militares de Llucalari, en Alaior, y Biniancolla, en Sant Lluís. La Norma Territorial Transitoria (NTT) permitirá al Consell, hasta que no se complete la revisión del PTI, fijar ordenación, suspender la vigencia de algunos artículos del Plan Territorial, y legitimar la ejecución de transformaciones urbanísticas.
Es este último punto, señaló Huguet, al que se ha acogido la Conselleria de Ordenación del Territorio. "Hemos preguntado a los ayuntamientos sobre suelos que llevan años intentando desarrollarse", afirmó, "y estos lugares pretendemos que tengan una actividad inmediata tras la aprobación de la norma".
Un documento que acumula retraso pero que el conseller tiene claro que quiere ver terminado este año, con su aprobación inicial antes del verano y la definitiva seis meses después, tal y como establece la Ley 7/2012 de medidas urgentes para la ordenación urbanística sostenible en su disposición adicional novena.
Sobre si se trata de suelo urbanizable en el que no existe nada definido, Huguet negó este extremo y recalcó que en todos los casos planteados por los ayuntamientos se trata de terrenos en los que los proyectos habían quedado bloqueados durante años. "Estamos tocando puntos muy limitados de suelo", señaló el conseller.
Uno de esos ejemplos sería Caparrot, en Canutells, "la única urbanización que puede crecer en Maó", manifestó Huguet, quien al mismo tiempo recordó que el propio Consistorio presentó alegaciones al PTI en el momento de su tramitación para pedir que no se prohibiera edificar en esta zona del municipio.
En el término de Es Mercadal, Huguet se refirió a la existencia de "convenios urbanísticos con compromisos que no se han cumplido" en Playas de Fornells, mientras que en Arenal den Castell el PTI desclasificó un solar destinado a un hotel, el llamado sector Casor; el alcalde del municipio, Francesc Ametller, mostró recientemente su interés en desbloquear ambos casos.
Ciutadella incorporará a la Norma la Unidad de Actuación A-3 en Santandria, donde existía un proyecto hotelero aprobado, explicó Huguet, pero el PTI recalificó la zona como verde.
En Sant Lluís la Norma que elabora el Consell podría librar al Ayuntamiento de una de las reclamaciones millonarias que acumula, ya que los promotores de viviendas unifamiliares en Son Ganxo estarían dispuestos a dialogar -la indemnización que piden al Consistorio es de 12 millones de euros-, si se reconduce el aprovechamiento del suelo que modificó en 2003 el PTI.
En Ferreries, el Ayuntamiento pide incorporar cinco solares junto al aparcamiento de Cala Galdana, a cambio del terreno cedido por los propietarios para el parking de Cala Mitjana.
Operación con bisturí
Huguet recurre a la terminología médica para ilustrar lo que habrá que hacer en Son Bou para evitar las indemnizaciones millonarias que los promotores reclaman al Consell.
La zona se incorpora a la Norma por petición de Alaior y el objetivo es ejecutar la reordenación de tal modo que se puedan "reconducir los litigios" existentes, permitiendo a los promotores a los que el PTI obligó a cambiar de terrenos recuperar algunos aprovechamientos sin que se dañen los valores de la zona.
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