Los vecinos de Alaior ya se han pronunciado sobre si la ampliación del cementerio de Alaior es o no una necesidad acuciante para el municipio. La estadística que está desarrollando el Ayuntamiento para conocer la demanda real y el interés de la población en adquirir una sepultura está confirmando un interés al respecto entre los ciudadanos que el equipo de gobierno ya intuía.
El Ayuntamiento puso en marcha este estudio a principios de noviembre y durante este período ha recibido una treintena de solicitudes trasladando su firme compromiso de adquirir alguna dependencia del nuevo camposanto que el gobierno pretende abordar.
El concejal de Policía y Deportes, Arturo Pons, añade que a estas peticiones "con garantía" hay que sumarle otras cuarenta personas que han solicitado información, ya sea de la ubicación como del coste que podría tener un tumba individual, un mausoleo o un columbario. También han consultado la maqueta y los planos de esta ampliación. En estos casos, los ciudadanos tan solo han manifestado un interés latente. Falta aun que estas personas formalicen su voluntad.
A todo ello hay que añadir un tercer grupo de interesados. En este caso, se trata de una lista de personas que manifestaron en su momento su firme interés en adquirir alguna sepultura. Cabe indicar que esta documentación fue elaborada hace una quincena de años, es decir, durante la época que se planteó la ampliación del cementerio por primera vez. Este listado está compuesto por 94 personas. No obstante, al ser un documento antiguo, ha quedado desfasado. De ahí que el Ayuntamiento haya iniciado un barrido para descartar todas las personas que ya han fallecido o han renunciado a ello. Así, Pons indica que "de este casi centenar de interesados, podemos contar con la mitad".
Así las cosas, en total más de cien personas en total han notificado al Ayuntamiento el interés, ya sea firme o posible, de hacerse con una de las dependencias del ensanche que se plantea. Es por esta demanda real que el Consistorio mantendrá los planes de ampliación del cementerio puesto que "a día de hoy, el actual camposanto está saturado, tan solo dispone de un par de nichos de alquiler", indica. Pons también considera que la demanda podría verse multiplicada cuando se ejecuten las obras, puesto que "al ciudadano le cuesta más decidirse sobre planos y proyectos".
El concejal de Policía y Deportes asegura desconocer aun el coste real de la actuación. Avanza que cuando se conozca presupuesto y demanda se determinará si la ejecución se lleva a cabo en una o varias fases, según los cálculos económicos que baraje el gobierno municipal. El Ayuntamiento ya ha encargado el trabajo para la actualización del proyecto puesto que el plan original ha quedado desfasado. Cabe recordar que la voluntad del Ayuntamiento es aprovechar el proyecto que solo llegó a ejecutarse en un 10 o un 15 por ciento y cuyas obras se interrumpieron en 1998. La parcela consta de una superficie de 10.570 metros cuadrados, aunque el ensanche que se proyecta es de 5.755 metros cuadrados con una capacidad total para 675 tumbas y 30 urnas para cenizas. El proyecto describe una forma semicircular e incluye una novedosa zona para columbarios (nichos destinados a contener urnas cinerarias), otra para mausoleos y una tercera para tumbas individuales.
La estadística para conocer la demanda real y el interés sigue en marcha puesto que el proyecto no plantea plazos.
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