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El delegado de la Conselleria de Educación en Menorca, Julián Hernández, explicaba a mediodía de ayer que el curso escolar había empezado sin incidencias remarcables, con la práctica totalidad de las plazas docentes con su titular activo, sin obras entorpeciendo la actividad lectiva y con los colegios nuevos con todo el mobiliario a disposición.

En cuanto a los docentes, Hernández reconoció que se ausentaron algunas bajas producidas durante la última semana, además de varias medias jornadas que aún no se han asignado. Estas vacantes aún pendientes de adjudicar se concentran en Educación Secundaria, ya que ha sido esta misma semana cuando la Conselleria ha contado con toda la información relativa a las ramas educativas escogidas por los alumnos, así como las optativas.

Sobre las obras, la única duda estaba en el CP Pintor Torrent, con una pérgola apuntalada pero que cuenta con el beneplácito de los técnicos. No hay riesgo ninguno, dijo Julián Hernández.

El delegado de Educación reconoció un descenso significativo en el número de docentes, sobre todo en los institutos, una merma que se ceba en los interinos y que se compensa, afirma, con el incremento de horas de trabajo de los profesores activos. En Infantil y Primaria, explicó, son los mismos.

Lo mismo sucede con las ratios. Hernández asegura que en Primaria no notan cambios, sí en Secundaria, donde los grupos pasan a ser más numerosos, algunos con más de treinta estudiantes. El delegado agradece el esfuerzo de los profesionales en este sentido.

En cuanto a las aulas prefabricadas, la reducción ha sido considerable. De las 34 modulares empleadas el curso anterior se ha pasado a unas veinte, repartidas entre el IES Joan Ramis i Ramis (ocho), el CP Mare de Déu de Gràcia (tres), el CP Mare de Déu del Carme (otras tres), el CP Es Mercadal (dos) y tienen una el CP Pere Casasnovas, el CP Antoni Juan, el CP Tramuntana y el CP Sa Graduada. El descenso se produce por el fin de las obras del IES Josep Maria Quadrado, la desaparición de las prefabricadas en el IES Cap de Llevant y la inauguración de dos nuevos centros docentes, dijo ayer Hernández.
Sobre la libre elección de lengua para aprender a leer y escribir, el delegado comentó que la incidencia de este cambio normativo es residual, puesto que en Menorca apenas se ha solicitado aprendizaje en castellano (un 2 por ciento). "La inmersión lingüística en Menorca está asumida", comenta el delegado.

Un dato curioso. Se han solicitado 433 cambios de centro fuera de plazo, de los que se han aceptado 235 al estar suficientemente justificados.