"Mi madre es de Sudáfrica así que en Angola me siento como en casa"

Durante su estancia en Barcelona, Medina estudió Comercio Internacional y, tras un intenso verano en Menorca, decidió continuar su aventura en Londres. Fue precisamente en la capital de Reino Unido donde encontró su actual trabajo, que la ha llevado hasta Angola.

Medina se dedica a elaborar reportajes macroeconómicos de países emergentes, una labor que inició el pasado mes de junio en Luanda y que próximamente la conducirá hasta otro punto del mapa.

Estudió Comercio Internacional ¿Qué la llevó a decantarse por esta opción?
La verdad es que inicialmente yo quería estudiar Publicidad y Relaciones Públicas pero a mi padre no le hacía mucha gracia. Llegué a presentarme al proceso de selección de la Universidad Ramón Llull y me aceptaron aunque, unos días después, me llamó Agnès, una buena amiga de Barcelona, para decirme que había encontrado la carrera ideal para mí: comercio internacional. Ella se había informado en la feria de estudios universitarios que se celebra anualmente en Barcelona y me convenció. En esos momentos yo me encontraba en Menorca así que cogí el avión para realizar las pruebas en la Escuela Superior de Comercio Internacional de Barcelona. Me encantó la carrera y sus asignaturas. Gracias a Agnès escogí una opción que determinó completamente lo que hoy soy. ¡Cosas curiosas de la vida!

Durante su etapa de estudiante tuvo la oportunidad de estar un tiempo en Singapur gracias al programa Erasmus ¿Qué tal la experiencia?
Muy bien. Estuve en Singapur entre julio y diciembre de 2008 y, mientras estudiaba en la Singapore Management University (SMU), pude viajar por todo el sudeste asiático por cuatro duros. Hice expediciones a Malasia, Tailandia, Vietnam, Camboya, Indonesia e incluso fui a la isla de Borneo a ver a los orangutanes en su hábitat natural. Fue una época memorable, tuve la oportunidad de vivir mi propia experiencia, lejos de casa y de los míos. Todo esto me aportó mucho más de lo que nunca podré imaginar y viví experiencias únicas e intransferibles. Debo decir que guardo un diario desde entonces, ¡un día lo editaré y publicaré la gran odisea!

Al finalizar la carrera decidió marcharse a Londres ¿Tenía ganas de continuar descubriendo mundo?
Sí. Terminé la carrera en junio de 2009 y, tras pasar los meses de verano en Menorca, viajé a la India a hacer un poco de voluntariado. En octubre me fui a Londres, supongo que éste fue un paso más en mi proceso de internacionalización. Me apetecía mucho vivir en la capital de Reino Unido y allí compartí piso con dos amigos británicos que conocen mucho Menorca, Hattie y James. Todo era perfecto menos el trabajo.

¿El trabajo? ¿Por qué?
Conseguí un buen trabajo como analista financiera pero me resultaba muy aburrido. Mi trabajo consistía en analizar porfolios de edificios con un programa que habían diseñado y estudiar la rentabilidad y las opciones de inversión posibles. Estaba todo el día frente a un ordenador haciendo cálculos ¡Aquello no era para mí! Para dedicarte a esto te tiene que apasionar el dinero porque, eso sí, se cobra muy bien como analista financiero.

Así que decidió dejarlo...
Sí. Además, encontré la oferta de mi trabajo actual a través de la web social ASW. Me fui a Madrid a realizar unas duras pruebas de selección, que duraron una semana. Yo sabía que aquel era el trabajo de mis sueños y tenía mucha presión. Finalmente, me contrataron y por eso estoy en Angola.

¿Para qué empresa trabaja?
Trabajo para la empresa AFA Press Group, una agencia de comunicación internacional que se dedica principalmente al branding de países a través de sus campañas de comunicación. Así, envía equipos por todo el mundo para realizar una serie de reportajes macroeconómicos del país en cuestión que, posteriormente, se publican en prestigiosos medios de comunicación como periódicos y magazines para penetrar con más fuerza en el mercado internacional.

¿Cuándo llegó a Angola?
Estoy aquí desde el pasado junio y lo más probable es que me quede en el país hasta el mes de diciembre. Además, posiblemente tendré que volver en enero para cerrar el proyecto...

¿Cuál fue su primera impresión al aterrizar en el país africano?
¡Tuve mil impresiones! Angola es un país increíble y lleno de contrastes. Gran parte de la población vive por debajo del umbral de la pobreza y una minoría es inmensamente rica. Eso sí, todos tienen un corazón que no les cabe en el pecho. Es una sociedad muy agradable y hospitalaria.

¿Conocía a alguien en Angola?
El director editorial del proyecto estaba en Angola. Recuerdo que los primeros días fueron extraños, de adaptación. Como dice una amiga mía, uno tarda en adaptarse 14 días. Así que esperé y observé para ir aprendiendo y conociendo las nuevas costumbres.

¿Fue un proceso duro?
La verdad es que me he adaptado perfectamente a la vida en Angola, demasiado incluso. Aquí me siento como en casa. Hay que decir que al ser mi madre sudafricana, de algún modo lo llevo en la sangre, estoy africanizada. Es cierto que en Angola todo es muy diferente. Europa y África son dos continentes con diferencias abismales en cuanto a personas, valores y costumbres. Los angoleños son muy agradables y extremadamente hospitalarios, además de muy patrióticos. Quieren que te lleves la mejor impresión de su país. La verdad es que me he planteado quedarme aquí pero mi empresa me ofrece conocer mundo, así que, por el momento, seguiré adelante con otros proyectos y si algún día quiero regresar, siempre me quedará Angola.

¿Cómo es el día a día allí?
Es importante remarcar que aquí cada día es muy diferente, el dinamismo predomina en la capital, Luanda. Eso sí, aquí hay el peor tráfico del mundo. Uno puede estar una hora para recorrer un trayecto de sólo diez minutos. ¡Es increíble! Hay mucha confusión y la ciudad es extremadamente caótica pero le acabas cogiendo mucho cariño. Mi trabajo diario consiste en visitar a clientes, realizar entrevistas, presentar trabajos para que se aprueben y puedan ser publicados, ir a ministerios para recordarles que desde hace meses estoy a la espera de una audiencia, mantenerme informada en relación a la actualidad macro y micro económica del país para poder encontrar nuevas empresas que estén interesadas en el mercado americano, etcétera. En resumen, se trata de hacer muchísimas relaciones públicas.

¿Qué proceso sigue para la elaboración de un reportaje?
Al empezar el proyecto diseñas una estrategia de marketing y comunicación y decides qué sectores o aspectos de la economía quieres resaltar. Un estudio de mercado te permite conocer las personas o empresas que representan dicho sector. Por consiguiente, contactas con ellas personalmente. A continuación les presentamos el proyecto, la misión y visión, nuestra agencia y la del medio de comunicación. Tras realizar la entrevista les recomendamos una estrategia de comunicación y marketing utilizando nuestra plataforma. El contenido editorial se extrae de las diversas entrevistas, siempre revisadas de antemano por los clientes. El proceso de elaboración está muy estructurado y organizado. Personalmente, me encanta poder tratar con las personas más poderosas y cultas del país. Gracias a ello adquieres un bagaje cultural muy amplio y creas un abanico de contactos inimaginable, un "network" internacional.

¿Una vez haya finalizado el proyecto en Angola viajará a otro país?
Sí. Quizá vaya a Brasil. La verdad es que cruzo los dedos para que así sea pues existen grandes lazos entre Angola y Brasil. Además, nunca he estado Brasil y me encantaría vivir allí un tiempo. Podría vivir la experiencia del Carnaval y conocer el país. ¡Suena interesante!

Y a empezar de nuevo en otro lugar...
Sí. ¡Proyecto nuevo, país nuevo! La verdad es que no me cuesta volver a empezar, me gusta mucho el trabajo que hago y por ello me resulta fácil dedicarme en cuerpo y alma. Además, conocer un país nuevo siempre es muy interesante. ¡Este trabajo es muy dinámico y por eso me encanta!

¿Tiene tiempo de visitar Menorca?
Siempre que puedo viajo a la Isla. Madrid es mi base pero Menorca es mi casa. Echo mucho de menos a mi familia y a mis amigos, el aire fresco de la Isla y sus paisajes. Menorca es una Reserva de la Biosfera y, normalmente, la valoras mucho más cuando estás lejos. He viajado por diversos países pero la Isla tiene algo especial. ¡Es un paraíso!

¿Le gustaría instalarse en la Isla algún día?
Sí. Quiero criar a mis futuros hijos en Menorca. Mi sueño es tener una finca menorquina con muchos animales, rodeada de naturaleza y con mi familia, mis amigos y todo lo que más quiero cerca de mí. Quiero disfrutar de la calidad de vida, la tranquilidad y la paz de la Isla.

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