El hecho de que la mujer del ‘Caixer Casat’ sea la única protagonista protocolaria de las fiestas no convence a los escolares de Ciutadella

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Con el Ayuntamiento centrado en reforzar la seguridad y cumplir el nuevo Plan de Autoprotección de Sant Joan, una vieja polémica sobre las fiestas ha reaparecido en Ciutadella a rebufo del reciente debate suscitado en el Consell Infantil.

El organismo consultivo nacido en el año 2000, que ha alumbrado la pista de skate, el Casal Jove y campañas de concienciación sobre la inmigración, la limpieza viaria o la tenencia de animales, debate ahora si conviene aplicar la igualdad de género que se pregona desde la institución y el aula a unas fiestas tan marcadas por la tradición.

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«Tots som iguals, i també ens hauríem de tractar igual», esgrime uno de los documentos de partida del debate, que los noveles 'concejales' iniciaron el 20 de abril y proseguirán en el pleno de este mayo.

«Me gustaría ver a mujeres salir como cavalleres en las fiestas. Si cumplen todos los requisitos, deberían dejarlas participar», zanja Andreu Forcada, presidente del Consell Infantil. «Habría que dar mayor volumen y visibilidad al papel de la mujer para así destacarla más y no solo por el hecho de ser la esposa de (el caixer casat)».

El debate, muy vivo estos días en las redes sociales, también divide a los escolares en clase. Lo corroboran las respuestas que niños de quinto y sexto de Primaria de los distintos colegios de Ciutadella han dado al cuestionario planteado en la histórica sala de plenos del Ayuntamiento sobre el papel actual y futuro de la mujer en la fiesta.

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