Jesús Curiel, ‘trotamundos' del tenis

Durante su etapa en el CT Mahón, admite Curiel, «he sido muy feliz, todos éramos una familia, monitores, directiva, socios, alumnos y padres. Muy buen ambiente, hasta que llegó otra gente y no tuvimos la misma suerte; entonces cambiamos de club, al Malbúger, donde siguen mis compañeros de siempre dando clases de tenis y ejemplo de profesionalidad», explicaba ayer, desde las pistas de su nuevo club. Junto con el director técnico, Nito Llorens, ambos se encargan de entrenar la escuela de niños entre 6-18 años. «Nuestra labor es sacar los mejores jugadores de benjamín a júnior, que aprendan una buena técnica de golpeo, entiendan el aspecto táctico del juego y sean más fuertes a nivel emocional», nos detalla Curiel. Para conseguir eso, «han de trabajar duro, con ganas e ilusión; poco a poco irán mejorando y se divertirán más, ya que es un deporte muy complicado», advierte.

Un Curiel que se muestra encantado de trabajar junto a Llorens, con un currículum envidiable. «Es un lujo, principalmente porque es muy buena persona, lo que le hace ser mejor aún en el terreno profesional. Y por supuesto por su experiencia con jugadores de alto nivel como Rafa Nadal o David Ferrer, entre otros. Haber viajado y convivido con ellos te enseña aspectos del jugador (carácter) que puedes moldear en pista. La verdad, estoy muy contento porque nos entendemos muy bien, hablamos mucho de nuestros jugadores, lo que necesitan y demás y creo que formamos muy buen equipo», piensa en voz alta el técnico.

Curiel fichó por el CT Ciutadella sabedor que el club– como otros en las Balears– había vivido unos años difíciles. «Me dijeron que había poca gente pero ahora hay mucha gente, siendo una gran escuela de niños y adultos, con pádel y de tenis playa, organizando torneos internos y eventos sociales. Hay muy buen ambiente, una directiva nueva, joven, con mucha ilusión de trabajar para ayudar al club, socios jugando, etc. Estoy muy contento».

Nivel del tenis de Menorca

Para Curiel, en la Isla, «siempre hay jugadores que destacan sobre otros. Hoy en día, al haber menos jugadores que antes, disminuye la competencia y por eso también el nivel. Antes había más cantidad, los cuadros eran grandes y para llegar a la final era un duro recorrido en Menorca, imagina una Fase Balear. Aquello era un gran entrenamiento competitivo que hacía aumentar mucho el nivel», exclama, uno de los mejores jugadores que ha dado Menorca.

Un técnico que no pone reparos a la hora de advertir que «hay que salir de la Isla para aumentar el nivel, en todos los deportes. La competencia, el numero de torneos y gente que lo practica mejora el nivel deportivo. Se puede coger una muy buena base en Menorca pero si quieres ser mejor hay que salir a competir y entrenar con los mejores de Balears y a nivel nacional», subraya, sin ver difícil que salgan otros Joan Bosch, José Gómez, Nacho Coll o Piti Sintes, entre otros. «Simplemente han de tener cierto talento y esto combinado con un buen entrenamiento y ganas de trabajar duro lo puedes conseguir. Luego, un avión», bromea. analizando por qué en la Isla desde júnior afloja la cosa. «Es una edad que empiezas la carrera universitaria o un módulo de grado medio, hay que dedicar más tiempo a estudiar y eso impide progresar. Lo puedes conseguir con una beca de estudios por el deporte, pudiendo alternar ambas cosas, como lo hace Òscar Mesquida o Cris Moll en EEUU», dice un Curiel feliz en Menorca. «Nunca me ha interesado entrenar fuera de la Isla, estoy muy bien. En su día pude irme para aumentar de nivel, lo que me apetecía sinceramente», acaba Curiel, que sigue jugando porque le encanta el tenis. «Intento mantenerme en forma porque cuando pueda volveré a apuntarme al Campeonato de España de Veteranos, en el que quedé semifinalista en 2018».