Tres victorias separan al Valeriano Allés Menorca de repetir presencia en la final de la Superliga Femenina. La temporada pasada lo hizo como el gran tapado de la competición pero en la presente lo hace como el gran favorito tras finalizar la liga regular en primera posición, disponer del factor pista a su favor a lo largo de todo el play off y por la calidad y posibilidades que ofrece su plantilla. Enfrente volverá a estar el Universidad de Burgos, un viejo conocido, al que ya dejó fuera de la lucha por el título en la campaña 2008/09, en cuartos de final, y la pasada, también en semifinales, en ambos casos contra pronóstico al remontar la serie e imponerse en el último partido en El Plantío (1-2 y 2-3). Los precedentes favorables también se pueden extrapolar a la competición doméstica, donde las insulares se impusieron con solvencia en la primera vuelta (3-1) y de forma más ajustada en la segunda, en parte por la lesión de Vita Prychepa (2-3).
La fortaleza exhibida en el Pavelló hasta la fecha, donde sólo ha sido capaz de ganar el Tauron MKS Dabrowa Gornicza en la CEV Cup, es otro de los puntos a favor para las bermellonas, cuyo objetivo es viajar a Burgos la próxima semana con una ventaja que les permita resolver allí la serie o como mal menor, forzar un quinto partido para cerrar la eliminatoria en Ciutadella.
La plantilla está en perfectas condiciones y aunque ha dispuesto de una semana y media para preparar los dos primeros tests de la serie a conciencia, esta mañana realizará la última sesión de entrenamiento como es habitual. Por otra parte la afición ha respondido a la llamada del club y se espera un gran ambiente en las gradas, con más de un millar de seguidores que vestirán de rojo y entre los que la entidad de ponent repartirá 100 trompetas, 350 gorras y 500 globos.
El equipo, con ganas e ilusión
El entrenador del Valeriano Allés, Chema Rodríguez, afirma a pocas horas de iniciar la serie que "el equipo está bien y con ganas de jugar, hemos trabajado como cada semana y sólo pensamos en afrontar el partido de mañana -hoy para el lector-, y a partir de ahí encararemos el del domingo".
El manchego, que se desmarca de los comentarios que dan al equipo como favorito para llegar a la final y le sitúan con un 2-0 tras jugar en Ciutadella, advierte que "debemos estar concentrados y organizados porque sino estamos al cien por cien nos pueden pasar por encima, somos optimistas pero también prudentes porque respetamos al rival", del que considera que "su volumen de ataque pasa por las dos centrales (Regina Miloserdova y Sara González) y Soraya (Santos). Es un equipo cuyas jugadoras hace muchos años que juegan juntas y eso se nota, lo hacen de memoria, tácticamente son muy ordenadas y defienden muchos balones, aspectos que nosotros no tenemos".
Por último, augura un primer partido "disputado, largo y duro, en el que ellas tratarán de explotar sus armas y nosotros las nuestras pero jugamos en casa, delante de nuestra afición, donde nos sentimos cómodos y aunque ellas puedan tener ganas de revancha, debemos estar a un buen nivel. Serán dos partidos muy difíciles y parecidos en los que habrá que ver como nos recuperamos entre uno y otro".
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