Niños en un colegio. Algunas de las desgravaciones buscan favorecer la natalidad. | JAVIER

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Un total de 101.839 residentes en las islas se han beneficiado de alguna de las 22 desgravaciones fiscales propias del Govern que estaban en vigor en la declaración del impuesto sobre la renta de este año que acaba. El balance de fin de año que ha realizado la Vicepresidència del Govern indica que casi una cuarta parte de los ciudadanos de las Islas han tenido derecho a una de estas rebajas fiscales, casi un 30 % más que un año antes.

El resultado es que, de media, todos estos ciudadano se han ahorrado 317 euros al año sin tener en cuenta las rebajas de impuestos aprobadas a principio de legislatura. Las desgravaciones han supuesto una pérdida de ingresos de 32 millones de euros en las arcas del Govern o un ahorro fiscal global para los ciudadanos en función del lado desde el que se mire.

Una de las promesas de la presidenta del Govern, Marga Prohens, durante la campaña electoral fue la bajada de impuestos y la puesta en marcha de nuevas desgravaciones, como por ejemplo el cheque bebé. Se trata de ayuda que reciben las familias que han tenido un hijo. La cuantía de la ayuda aumenta en función de número de hijos siempre que se cumplan una serie de condiciones económicas relativas a los ingresos anuales de las familias. Durante este año, correspondiente a la renta de 2023, un total de 5.517 padres han disfrutado de esta ayuda por un valor medio de 507 euros cada uno de ellos.

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La desgravación que ha llegado a un mayor número de familias es la de gastos de compra de libros de texto: hubo 37.689 euros que se ahorraron una media de 157 euros cada una de ellas. Otros 22.953 residentes se pudieron desgravar impuestos por discapacidad física, psíquica o descendientes con esta condición con un ahorro medio cada uno de ellos de 110 euros. Hubo 16.803 contribuyentes que se ahorraron una media de 553 euros en la declaración de IRPF por el arrendamiento de vivienda habitual a determinados colectivos. Fueron el doble que un año antes.

Otra de las desgravaciones que han beneficiado a un mayor número de residentes es la de gastos de aprendizaje extraescolar de idiomas extranjeros. Se han podido acoger a estas desgravaciones un total de 12.940 personas con una reducción media de impuestos de 58 euros.

La desgravación más cuantiosa en conjunto de las que estaban en vigor es la de inversiones de mejora de la sostenibilidad de la vivienda habitual. Un total de 764 contribuyentes tuvieron acceso a esta reducción fiscal que les permitió ahorrar de media 2.207 euros. En general, el año pasado se beneficiaron de estas reducciones fiscales un 30 % más de ciudadanos que el año anterior, según el balance del Govern.