«Los retos del turismo son muchos, y siempre digo que, si queremos un turismo sostenible, es evidente que debemos apostar por la calidad en lugar de la cantidad. Es evidente que la masificación produce una excesiva presión sobre los recursos de un destino. La masificación existe pero se ha ‘desbordado' desde hace unos años, no por el incremento de plazas hoteleras, sino por la irrupción descontrolada de las plataformas de alquiler vacacional, que además de saturar muchos destinos y sobrecargar los recursos, han producido otros efectos adversos directamente sobre el mercado de la vivienda e, indirectamente, pero con un enorme impacto sobre la potencial disponibilidad de mano de obra, que es gentrificada en los destinos eminentemente turísticos, sin reportar por otra parte demasiados beneficios a la sociedad en términos de riqueza y empleo. Las externalidades negativas de esta dinámica, están, sin duda, en el nacimiento de fenómenos como la turismofobia. Frente a ellos debemos decidir qué turismo queremos, dimensionar nuestra oferta, en cantidad y calidad, y establecer una estrategia que determine la carga turística óptima y siente las bases para un desarrollo sostenible social, medioambiental, y económico», explica.
Respecto a los cruceros, Escarrer reclama que sean regulados. «Los cruceros son una oferta que ha llegado para quedarse y puede ser positiva para los destinos siempre que se planifiquen las capacidades y se regule y ordene su actividad de forma adecuada», indica.
El Govern ha anunciado una reforma de la Ley del Turismo. Escarrer reclama un gran pacto entre partidos. «Siempre he dicho que los empresarios no debemos dejarnos llevar por el color del Govern de turno y que solo debemos centrarnos en si las decisiones políticas son buenas o malas para el tejido que genera riqueza y empleo en el país. En un tema tan esencial para una comunidad como es el turismo para Balears, debería haber un gran pacto entre partidos, basado en una estrategia estable compartida a medio y largo plazo, que permaneciera más allá de los cambios de gobierno. En este sentido, al igual que la Ley Turística del Govern de Armengol había mantenido muchos elementos de la Ley turística del Partido Popular del año 2012, (que nunca se derogó) espero que aquellos aspectos positivos de la última Ley, como pueden ser las medidas de eficiencia energética en los establecimientos, se puedan mantener e incluso mejorar para facilitar los objetivos de sostenibilidad que todos compartimos», señala.
Interrogado sobre la intención del Govern de levantar la actual moratoria se muestra más partidario de incentivar la modernización que de las medidas restrictivas. «De nuevo, recuerdo que nuestro país, y nuestra Comunidad por supuesto, deben apostar por la calidad en lugar de la cantidad, y me consta que el Govern comparte esta apuesta. Hay diversas formas de hacerlo, y personalmente prefiero apostar por incentivar la mejora y reposicionamiento de los establecimientos, que en medidas restrictivas como las moratorias. Por supuesto, creo que es esencial ordenar muy bien lo que ya tenemos y combatir la oferta ilegal de plazas de cualquier tipo, y muy especialmente de alquiler vacacional, cuya expansión descontrolada es, como ya he dicho, un problema muy grave por su impacto no ya solo en nuestro sector, sino en el conjunto del tejido social», asegura.
El presidente y CEO de Meliá se muestra partidario de incentivar la reforma y modernización de la planta hotelera y advierte que «calidad y sostenibilidad forman un binomio indisoluble». Interrogado sobre si debe transitarse hacia el decrecimiento, Escarrer apuesta por la calidad. «Yo creo que hay que apostar por la calidad. Hay que planificar y ordenar lo ya existente. Hay que eliminar la oferta ilegal de cualquier tipo. Deben potenciarse fórmulas de transformación, ya sea de plazas de menor a mayor calidad o la reconversión de establecimientos turísticos obsoletos en viviendas», manifiesta.
Escarrer asegura que la temporada ha sido muy positiva y apunta a que han compensado la inflación sobre los costes. «Las habitaciones superiores y los hoteles de lujo tienen un peso creciente en nuestra cartera. Esta orientación está en línea con la creciente demanda de hoteles premium y lujo, que son los que más han incrementado sus tarifas, con los hoteles de Balears registrando las mejores tarifas», señala.
Finalmente, Escarrer apunta a la necesidad de mejorar la eficiencia en el consumo de recursos naturales. «Lo que es claro es que todos debemos reducir nuestro consumo de agua y electricidad, mediante fórmulas de eficiencia energética, mayor utilización de energías renovables y, por supuesto, de una mayor concienciación y control», explica.