La ministra de Hacienda, María Jesús Montero comparece en el pleno del Senado este miércoles que debate conjuntamente los objetivos de estabilidad presupuestaria y de deuda pública y el Plan de Reequilibrio. | Efe - FERNANDO ALVARADO

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La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha afeado al PP que «se emplee a fondo en perjudicar a comunidades autónomas y ayuntamientos» al rechazar unos objetivos de déficit que les dan un mayor margen de gasto. Montero interviene este miércoles en el Senado para defender los objetivos de estabilidad, paso previo a los Presupuestos, que serán rechazados por la mayoría absoluta del PP según ha avanzado esta formación, una decisión que para la vicepresidenta es «un sinsentido».

Aunque ha reconocido la «autonomía» y «legitimidad» del Senado, Montero ha criticado que el PP use esta cámara como «contrapoder» o «fortín» y prive a las administraciones territoriales de un mayor margen de déficit. El PP ya ha mostrado su intención de votar en contra de los objetivos y, preguntada en el Congreso por la posibilidad de cambiar este voto, su secretaria general, Cuca Gamarra, lo ha descartado porque el Gobierno ya «ha tenido muchas posibilidades» de rectificar, por ejemplo, «cuando las comunidades autónomas se opusieron a esa senda de déficit».

Montero ha acusado al PP de «tirarse piedras contra su propio tejado» al votar en contra de los objetivos que ya han utilizado la mayoría de las regiones, incluidas las gobernadas por la formación, para elaborar sus cuentas. «No tiene ni pies ni cabeza», ha resumido. «En caso de que el PP persista en esa estrategia de obstrucción», ha explicado Montero, el Gobierno volverá a presentar la senda tal y como establece la Ley de Estabilidad y «si siguen bloqueándolo», se recurrirá a los objetivos incluidos en el programa de estabilidad de abril, ya avalados por la Comisión Europea, una posibilidad recogida en un informe de la Abogacía del Estado que no se ha hecho público.

El objetivo global de déficit es del 3 % del PIB para 2024 en ambos casos, pero el reparto por subsectores de abril da menor flexibilidad a comunidades autónomas (equilibrio en lugar de una décima de déficit) y ayuntamientos (dos décimas de superávit en lugar de equilibrio). El senador del PP Gerardo Camps Devesa ha reiterado el rechazo de su formación porque supone un incremento del gasto público y ha acusado al Gobierno de ser quienes «amenazan» a comunidades autónomas y ayuntamientos con restringir su margen de déficit basándose en un informe de la Abogacía del Estado de cuya existencia ha dudado.

La senda propuesta por el Ejecutivo y aprobada por el Congreso prevé reducir el déficit público al 3 % del PIB en 2024, cumpliendo así las reglas fiscales europeas, y avanzar en esa corrección en 2025 (2,7 % del PIB) y 2026 (2,5 % del PIB). La deuda bajará al 106,3 % del PIB en 2024, el 105,4 % del PIB en 2025 y el 104,4 % del PIB en 2026. Junto a la senda de estabilidad, el Gobierno ha presentado el límite de gasto no financiero o techo de gasto para 2024, que no se somete a votación y que asciende, una vez incluidos los fondos europeos, a un máximo histórico de 199.120 millones de euros, un 0,5 % más que en 2023.