Tensión, e incluso pelea, entre los diputados italianos. Unas declaraciones de Gianfranco Fini, presidente de la Cámara, en un programa de televisión desataron la polémica. El dirigente recordó que la mujer de Umberto Bossi --cabeza de la Liga Norte, socia de Pueblo de Libertad (PDL) en el Gobierno transalpino-- se jubiló en los 90 con sólo 39 años. Los miembros del partido afectado defendieron a la esposa de su líder y llegaron a pedir la dimisión del "inoportuno" político. Ocurrió sólo un día después de que el Ejecutivo consiguiera 'in extremis' un acuerdo sobre el plan anticrisis que Silvio Berlusconi, primer ministro, tenía que presentar ayer ante sus socios europeos, en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno.
Berlusconi había sufrido para hacer los deberes que tenía que presentar en la cumbre: el plan anticrisis que le reclamaba con insistencia la Unión Europea (UE). Lo consiguió el martes, 'in extremis'. Poco después, Fini desató una nueva polémica. En medio del debate sobre la reforma de las pensiones, el principal punto de desacuerdo entre los dos partidos del Gobierno, el presidente recordó en un programa de televisión que la mujer de Bossi se jubiló en los 90, con 39 años.
Marco Reguzzoni, líder de la Liga Norte en la Cámara, defendió a la esposa del dirigente, cuya jubilación fue acorde con "las reglas de la época". En base a ello, arremetió contra Fini por "hacer política y participar en programas de televisión". Sus compañeros recibieron las palabras del diputado al grito de "dimisión", la del "inoportuno" mandatario italiano.
La Liga Norte está convencida de que Fini "no se preocupa de la institución que representa, sino de sus propios intereses". Italo Bocchino, vicepresidente del su partido, Futuro y Libertad (FLI), rompió una lanza en favor del que un día fuera el principal aliado de Berlusconi: "El presidente de la Cámara, siendo un líder político, tiene todo el derecho a hablar".
La defensa provocó aún más alboroto, hasta el punto de que la presidenta de turno, Rosi Bindi, tuvo que suspender la sesión, no sin antes disculparse ante un grupo de escolares que estaban presentes... "Por el espectáculo poco edificante que les hemos ofrecido". A pesar de sus palabras, los diputados continuaron con su disputa.
Lo que era una batalla verbal se convirtió en una pelea en toda regla. Un miembro de FLI y otro de la Liga llegaron a las manos, después de intercambiar unos gritos desde sus respectivas bancadas.
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