víctima. Tenía 29 años - INTERNET

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La mujer de 29 años, cuyo cadáver fue hallado el martes en Mutxamel (Alicante) a raíz de declararse un incendio en su vivienda, recibió nueve puñaladas presuntamente asestadas por su marido, informaron ayer fuentes de la Guardia Civil y de la Subdelegación del Gobierno.

Este hecho confirma, según aseguraron las mismas fuentes, que la muerte de esta mujer es "un episodio de violencia machista", el primero de este año que se registra en la provincia alicantina y el segundo en el conjunto de la Comunidad Valenciana.

De hecho, la subdelegada del Gobierno en Alicante, Encarna Llinares, participó ayer por la mañana ante la puertas de este organismo estatal en una concentración de repulsa a la violencia machista, en la que se guardaron cinco minutos de silencio.

"Ha sido asesinada a manos presuntamente de su marido", dijo Llinares, quien aseguró que no existían denuncias por maltrato en el seno de esta pareja.

Aunque ambos estaban en trámites de separación, la pareja vivía "bajo el mismo techo" junto a sus dos hijos, uno de 5 y otro de 1 año de edad.

La autopsia ha revelado, según apuntó el teniente coronel de la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante, Ezequiel Romero, que la muerte de esta mujer se produjo como consecuencia de las heridas infligidas por la agresión de su marido con un arma blanca y no por el fuego que presuntamente y con posterioridad pudo provocar este último en el interior de la vivienda.

Este extremo no está aún confirmado ya que el hombre, que permanece ingresado en el Hospital de San Juan de Alicante por inhalación de humo, aún no ha declarado ante la Guardia Civil.

En declaraciones a los medios, Llinares aseveró que "la única forma de acabar" con la violencia machista "es denunciando".

Con la muerte de esta mujer, la tercera en este mes de abril a manos de su pareja o ex pareja, se eleva a 19 el número de mujeres víctimas de violencia machista en lo que va de 2011 en España.

Concentración
Medio millar de habitantes de Mutxamel (Alicante) expresaron ayer en una concentración de un minuto de silencio su repudio por la muerte de su vecina Mireia Roma Blasco.

La concentración junto al ayuntamiento se produjo al término de un pleno extraordinario y urgente del ayuntamiento de Mutxamel, en el que se aprobó una declaración que condena la "gratuita, injusta, innecesaria y cruel muerte" de su vecina y en el que se decretó un día de luto oficial.

La sesión plenaria, presidida por la alcaldesa, Asunción Llorens, expresó su apoyo incondicional a los familiares de la última víctima de la violencia machista.

También se animó "a denunciar cualquier situación de la que los vecinos sean conocedores que pueda suponer un riesgo de violencia de género".