La víctima, identificada como Khaled Raed Arouq y originario de la ciudad norteña de Yenín, fue trasladada a un centro hospitalario tras recibir un disparo de arma de las tropas israelíes en el abdomen, tal y como detalla la agencia palestina Wafa.
Wafa también asegura que durante la incursión las fuerzas israelíes lanzaron «munición real» y «granadas aturdidoras» contra la población de esta zona y que los vehiculos militares allanaron una casa.
El menor, cuyo padre trabaja en el servicio de Inteligencia Militar palestino, será enterrado en su ciudad natal de Yenín. Otro menor palestino resultó hoy también herido durante una incursión del Ejército israelí a la ciudad de Beit Furik, en el este de Nablus, según informó el portavoz de la Media Luna Roja Palestina, Ahmad Jibril. «Los equipos de emergencias atendieron a un menor herido por balas del Ejército durante los enfrentamientos en la ciudad de Beit Furik y posteriormente fue trasladado a un hospital», detalló.
Cisjordania ocupada vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), y en lo que va de 2024 al menos 159 palestinos han muerto por fuego israelí, la mayoría supuestos milicianos o atacantes, pero también civiles, incluidos cerca de una treintena de ellos menores, según el recuento de EFE, tras cerrar 2023 como el año más letal en dos décadas con más de 520 muertos.
Tras el ataque de Hamás del 7 octubre, el Ejército israelí intensificó sus ya frecuentes incursiones en la Cisjordania ocupada donde han muerto al menos unos 486 palestinos en incidentes violentos con Israel, principalmente con tropas, pero también con colonos
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