Con un reparto renovado casi en su totalidad y una trama que «conecta con la esencia de las primeras temporadas», la serie 'Élite' estrena el 18 de noviembre en Netflix su sexta entrega, que sus creadores y protagonistas definen como la más «madura, emocional e intensa» hasta la fecha. Ya inmersos en la grabación de la séptima, para la que se acaban de anunciar nuevas incorporaciones como la de Maribel Verdú, los creadores de la serie, Carlos Montero y Jaime Vaca, coinciden en señalar que su objetivo es hacer ver «que la serie está muy viva».
Los nuevos fichajes de esta sexta temporada son Álex Pastrana, Carmen Arrufat, Ander Puig, Ana Bokesa y Álvaro de Juana. La idea es dar «un aire fresco» a la serie pero mantener su «esencia» y sus «tramas intensas» y que el espectador pueda acercarse a ella aunque no haya visto las anteriores. Élite se ha caracterizado desde su inicio por abordar temas candentes y peliagudos como los malos tratos, las violaciones o la transexualidad. «Tratamos los temas de forma frontal y siendo conscientes de que nuestro público es muy inteligente y es consciente de que ve una ficción y no un ejemplo», afirma Vaca. Se trata, añade, de bucear en «preguntas incómodas» con nuevos conflictos planteados «desde el cuidado y el respeto».
«Hemos abierto una línea de profundidad e intensidad en tramas respecto al tratamiento de la cuarta y de la quinta», precisa Montero y el actor Manuel Ríos abunda en la misma idea: «Venimos de temporadas muy cañeras y esta tiene un tono diferente; es más madura, se tocan temas delicados y se cuentan tocando muchos palos». Para Ríos, que en la serie da vida a Patrick Blanco, los personajes y los propios actores han evolucionado mucho. «Rodar una serie como 'Élite' quita miedos e inseguridades como actor», afirma. La argentina Valentina Zenere, que se incorporó en la quinta temporada, sostiene que su personaje experimenta una gran evolución.
«Me siento responsable de poner cara y voz a una situación de muchas mujeres», dice la actriz, cuyo personaje se tornará «mucho más real, empático, vulnerable y hasta a veces desorientado». Según Ana Bokesa, uno de los nuevos fichajes, en esta temporada la serie «se acerca más al plano de los sentimientos», sin perder su sello de «instituto elitista marcado por fiestas, conflictos y situaciones límite». «El tema sexual se queda en segundo plano porque aparece bajo relaciones de afecto», dice Carmen Arrufat, que llega a la serie junto a Alex Pastrana en una de las que serán las tramas más convulsas.
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