En el informe de Pyme Menorca, Cala en Blanes se anunciaba con el triste nombre de "descuidada", al que fácilmente podemos agregar el de "maltratada". O se aumenta la frecuencia de recogida de residuos o se ponen más contenedores. Ayudaría un ligero aporte de civismo por parte de los que depositan la basura. Como sea, ahí van de la mano: administración y educación, ambos, en caída libre.