Por haber sufrido la conocida, digamos «enfermedad» del bullying desde mi más tierna edad y haberla arrastrado toda una vida por temas diversos, haberla visto como se iba mi padre con «sa barqueta sense calafatar» a los ochenta y seis años, tras una vida de lucha, trabajo y siempre mirando para y por el prójimo. Intentando apoyar a los pescadores y hombres de mar, suavizándoles sus luchas en sus trabajos, manteniéndoles sus remos en reposo mientras su caminar fuese grato y reposado a base de poner un motor en marcha puro invento de su capacidad, de inventor como tantas veces demostró ser, si bien jamás presumió de ello. Confieso me horroriza transcurridos treinta años de su fallecimiento, a día de hoy se encuentre alguien intentando negar, tan solo por no patentar el mismo comportando lo hiciera la persona que le había pedido hiciera un motor marino. Aquel hecho siendo casual por no caer en la cuenta que debió pagar la patente, todo tan fácil como eso, por lo cual hay quienes que lo continúan machacando a pesar de todo. A esto también se le llama bullying.
Xerradetes de Trepucó
Qué es el bullying?
04/12/24 4:00
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