El relevo al frente de Autoridad Portuaria de Balears ha aportado un cambio de talante, que escenificó ayer el nuevo director, Juan Carlos Plaza. Antes de reunirse con el Consejo de Navegación del puerto de Maó, también quiso conversar con un representante del GOB. El organismo que gestiona los puertos del Estado en las islas mantiene el calendario para acometer, a partir de febrero, las obras de dragado de la rada mahonesa.
No cuestiona la necesidad de llevar a cabo esta actuación, porque la acumulación de fangos y lodos en el fondo del puerto ha reducido el calado útil, lo que dificulta e incluso puede llegar a impedir las maniobras de atraque de grandes buques.
A la espera de conocer el resultado de las nuevas analíticas encargadas tras el pronunciamiento de la Fiscalía de Medio Ambiente, a favor del proyecto de dragado, Autoridad Portuaria actúa con prudencia con el objetivo de contar con todas las garantías para acometer el proyecto. La máxima información, la transparencia y el diálogo que ha impulsado con los agentes empresariales y sociales el nuevo presidente de APB, Alberto Pons, han abierto un nuevo escenario para desbloquear el dragado del puerto mahonés.
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