En cualquier modelo de resolución de conflictos, explican que dos interesados no llegan a una solución si una de las dos partes no quiere. Lamentablemente es lo que está pasando durante estas semanas con la huelga educativa. Hay que volver a la normalidad cuanto antes, porque los más perjudicados en esta huelga son los niños y niñas de nuestras islas, y no tengo nada claro que realmente estemos pensando en ellos.
Empecemos por aceptar nuestros errores y hacer autocrítica, creo que todos nos equivocamos, el Govern también ha cometido errores y debe mejorar algunos aspectos. Esto no quiere decir que esté en contra del TIL, al contrario, como he dicho en anteriores artículos, estoy seguro que el trilingüismo dará un salto de calidad al sistema educativo de Balears, y no tengo absolutamente ninguna duda de que este es el empeño del Govern, mejorar la educación en nuestros colegios e institutos. Si no les importará, había sido mucha más fácil quedarse con las manos cruzadas, sin hacer nada.
La manifestación del pasado domingo fue una de las más multitudinarias de los últimos años, debe ser respetada y tomada en cuenta, convencido de que el Govern ha tomado nota. Sobran las guerras de cifras, sobre es el porcentaje de población que se manifestó y está en contra del TIL, o cual es el porcentaje que vota o dejo de votar en las pasadas elecciones, discusiones estériles que solo sirven para calentarse y encender los ánimos.
Como decía al principio, creo que dos no llegan a un acuerdo si los dos no quieren, de la misma manera que creo que el Govern y Conselleria han cometido errores, también creo que a la hora de negociar han realizado muchas concesiones y siempre han tratado buscar una solución. ¿La prueba? La propuesta es que la Conselleria ha propuesto que solo haya que dar 2 horas más en inglés en infantil y primaria, 0 horas en secundaria y bachillerato. Con total sinceridad, creo que es una propuesta que cualquier centro de estas islas puede llegar a cabo, propuesta más que aceptable.
No puede llegar entender que tras las diferentes negociaciones y concesiones de la Conselleria, el punto de desacuerdo para los sindicatos sea la Llei de símbols. Muchos pensábamos que era un conflicto sobre el trilingüismo y la educación, no sobre política. No me gusta que cualquier edificio público sea utilizado para hacer campaña, sea a favor de unos u otros. Y que este sea el problema principal para llegar a un acuerdo, me parece una falta de respeto a alumnos, como los de segundo de bachillerato, que se están jugando su futuro inmediato.
Solo pediría a Govern y sindicatos que lleguen a un acuerdo lo antes posible, que cedan las dos partes, y como he dicho antes, solo se llega a una solución si las dos partes quieren. No salgan de la sala de negociaciones hasta que no exista un acuerdo.
Politólogo i vicesecretario de Organización del PP Menorca
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