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Hay que felicitar a todos los profesionales de los servicios que trabajan en la prevención y extinción de incendios forestales. Ayer demostraron, una vez más, su eficacia en la actuación en los fuegos provocados entre Cala Mitjana y Binigaus. A pesar de la dificultad de los accesos, del fuerte viento, de las altas temperaturas y de que no pudieron contar con el apoyo aéreo, puesto que los medios estaban centrados en Andratx, fueron capaces de minimizar los efectos de unos incendios que habrían podido causar un enorme daño a una de las zonas boscosas importantes de la Isla.

Es preocupante que otra vez haya alguna persona que tenga la intención de prender fuego en el bosque. Todas las hipótesis apuntan a que se repite la historia. Es evidente la similitud con el caso del año pasado, con los fuegos del 10 y 14 de septiembre, provocados por un pirómano, detenido a los pocos días en Ferreries.

Es importante en estos casos pedir la colaboración de los ciudadanos, para fomentar una actitud cívica con el medio ambiente, de respeto a la conservación de la naturaleza, evitando acciones de riesgo y pidiendo a los demás que también sean cuidadosos con los espacios naturales de la Isla.