Mamotreto en el Fonduco

La noche de la Virgen del Carmen, cenando con mi esposa en el restaurante de mi amigo Nacho, al que por cierto le damos una nota alta, en calidad, servicio y precio... ¡Qué carajo!, lo digo porque es una realidad y porque somos amigos…, comentábamos los tres que teniendo uno de los puertos más importantes del Mediterráneo, tengamos que soportar visualmente una serie de edificios totalmente degradados con el paso de los años, por culpa de unas decisiones tomadas en su día por algún irresponsable político, que le tendría que caer la cara de vergüenza por haberse opuesto en vez de dar todas las facilidades a los inversores, para que un edificio en su día emblemático, se transformara en un hotel de 5 estrellas. Se trata del antiguo hostal-restaurante Rocamar, y ello hubiera evitado que veamos su degradación día a día.