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La temporada de cruceros se inauguró el pasado lunes en Maó, con la llegada del "Island Escape", y lo hará el próximo jueves en Ciutadella, donde el "Quest for Adventure" tendrá el honor de ser el primero que atraque en Son Blanc. Las previsiones en ambos puertos son positivas, ya que mientras en Llevant se esperan un centenar de escalas, en Ponent, que está intentando hacerse un hueco en este tipo de mercado, serán ocho. No cabe duda de que la llegada de miles de cruceristas es una oportunidad para beneficiar a la economía local, concretamente a sectores como el comercio y la restauración. Por ello, es necesario que se dé respuesta a lo que las compañías solicitan a la llegada de los buques: actividades complementarias en exclusiva y una recepción. De igual manera, los visitantes que paseen por los centros de las ciudades quieren ver un paisaje de establecimientos abiertos. En este sentido, si Menorca quiere crecer en este segmento turístico tan competitivo debe confeccionar unos buenos planes de acogida, ya que el atractivo natural no es suficiente. Tras asistir a la Feria de Cruceros de Miami, los alcaldes Águeda Reynés y José María de Sintas expresaron su satisfacción por las buenas perspectivas para 2014. De la experiencia de este año dependerá de que éstas se concreten.