TW
0

La presencia menorquina en Modacalzado, que abre sus puertas el próximo sábado, se reduce este año a seis empresas. Año tras año la asistencia se ha ido reduciendo por diversos motivos: el encarecimiento de los costes de los expositores, la caída del mercado nacional y el progresivo cambio en la estrategia a la hora de comercializar los productos, paso que también han dado otros sectores como el de la bisutería. De hecho, varios empresarios menorquines, que ya han renunciado a acudir a la feria, han apostado por participar esos mismos días en exposiciones en establecimientos hoteleros de Madrid, una fórmula que se considera mucho más atractiva y que puede dar un mejor resultado. De todas formas, y más aún en la actual situación de crisis que vive España, los emprendedores se están volcando en la exportación como vía para garantizar la supervivencia de sus negocios. Sin embargo, la tarea no es fácil porque moverse en los mercados internacionales requiere un esfuerzo económico importante, contando además con la barrera que supone la insularidad. Ante esta situación, las ayudas por parte de las administraciones para poder competir en igualdad de condiciones son imprescindibles si se quiere mantener el tejido industrial y con ello generar riqueza y empleo.