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Se denominan "pioneros" a quienes inician la exploración / colonización de un nuevo territorio (también de índole económico) o quienes dan el primer paso hacia la mejora / innovación de cualquier actividad humana. Menorca, especialmente durante el pasado siglo XX, fue tierra de pioneros. Todos recordamos a los Montañés, los Codina, los Pons, los Mascaró, los Sintes, los Gomila, etc. Todos ellos fueron pioneros en sus respectivos campos productivos. Pero lamentablemente aquella inercia se ha paralizado. Aseguran que la culpa es de las exageradas normativas autonómicas restrictivas que los políticos, influidos por ideologías divorciadas del sentido común, nos han impuesto. Quizás.
Pero las iniciativas pioneras no se circunscriben solo al terreno económico, sino que también pueden brotar en el territorio lúdico, social, etc. Por ejemplo la "creación" de la conocida "pomada" (esa "seña de identidad" menorquina según algunos) fue la iniciativa de un pionero que ya venía probando su agradable efecto de forma habitual. Pero ahora que escasea aquel espíritu pionero, me complace anunciar que en el puerto de Mahón ha surgido uno nuevo. Se trata de la iniciativa de un "nouvingut" (en expresión de algunos) quien, abducido por la modernidad, ha tenido la iniciativa, inédita en la isla, de implantar en su restaurante asiático una mejora: un nuevo tipo de "water" revolucionario que ya es muy habitual en su país de origen. De estética impecable el nuevo ingenio puede contemplarse en los servicios de señoras (de momento se discrimina a los caballeros) del local en cuestión. Se trata de una evolución moderna (pionera en la isla) del usual receptor de emulsiones corporales que, concluidas las operaciones habituales, presenta la novedad de limpiar y masajear las partes más nobles del cuerpo humano. Un avance higiénico sin duda. Y todo ello de forma automática, sin manos.

Expliquémoslo. Acabados los deberes habituales, y ubicada la parte más tierna del cuerpo en posición idónea, debe pulsarse el botón adecuado para que, de inmediato, unos decididos y vigorosos chorros de agua tibia comiencen una limpieza que, a modo de turbina, se reconvierte en reconfortante ducha íntima. Con ello aquella zona corporal retorna a lo que debe ser su habitual estado de limpieza y pulcritud. Queda ya atrás la época de lo que en Alemania llaman el síndrome de IBM ("immer besser manual"): siempre mejor a mano. Se acabó el desperdicio de papel. Ahora la técnica sustituye a las manos. "Tiempos modernos" (Chaplin. Siempre Chaplin).

Naturalmente todo nuevo invento requiere de unas sencillas instrucciones de uso que en este caso se muestran a la altura de la vista del usuario. Me comentan sin embargo que han surgido problemas. Parece ser que al notar extraños y novedosos movimientos en las cercanías de su propiedad más íntima, algunas señoras se asustan o incluso, histéricas, chillan y lanzan exabruptos y no pocas han salido despavoridas y escandalizadas del baño. Ese levantarse apresuradamente y sin la debida contención ha provocado ya graves inundaciones en aquellos aseos ya que al artilugio sigue funcionando "non-stop" hasta completar su misión. Esta indudable innovación en el campo higiénico sanitario menorquín, como todas siempre incomprendidas en sus inicios, es sin duda obra de pioneros. Deberemos referenciarlo para la pequeña historia menorquina ¿no?.

Nota
Mañana, día 13, Kim Novak, la actriz más turbadora para muchos de mi generación, cumple 80 años. Quienes no olvidamos su belleza y sus ojos de gata, le deseamos un "happy birthday". ¡Quien hubiese podido ser William Holden en "Picnic"!