TW
0

El acuerdo alcanzado ayer para el mantenimiento del travelift en el puerto de Maó es una excelente noticia por un doble motivo. En primer lugar, se garantiza la prestación de un servicio básico para la actividad marítima y se evitan, además, desplazamientos de embarcaciones a Mallorca con el coste económico que ello supone. Por otro lado, el éxito del pacto con Autoridad Portuaria hay que atribuirlo a una acción conjunta de las patronales ASMEN y APEAM y el decisivo respaldo del Ayuntamiento. En este sentido, la alcaldesa Águeda Reynes y el teniente de alcalde Salvador Botella no dudaron un instante en plantarse en el Cós Nou para negociar a pie de muelle y defender los intereses de la ciudad. La unión entre el sector y la Administración local fue decisiva para frenar un proceso que parecía irreversible y es un ejemplo a tener en cuenta. De forma especial, hay que destacar la respuesta del Consistorio a la hora de contribuir a buscar una solución rápida y eficaz. En un momento en el que el prestigio de la clase política está bajo mínimos, actuaciones como la de ayer son las que ayudan a recuperar la confianza del ciudadano en sus gobernantes.