Menorca asiste a la transformación que, sin prisa pero sin pausa, está experimentando el tejido comercial. Era cuestión de tiempo que grandes cadenas de distribución de diferentes segmentos contemplaran la Isla en sus planes de expansión. Las firmas consolidadas no han dejado de dar pasos en firme, fruto de los cuales en los últimos años hemos asistido a la inauguración de varios establecimientos, y se mantienen activas con nuevos proyectos. Tampoco se han despistado las que aspiran a implantarse en Menorca y captar nuevos clientes. Aunque la crisis actual aconseja revisar también nuestras pautas de consumo, lo cierto es que hay necesidades que deberemos seguir cubriendo. Por ello, y ante la inviabilidad jurídica de aprobar medidas proteccionistas y la iniciativa de los "grandes", el pequeño comercio y los productores locales deben revisar a fondo sus expectativas y sus estrategias a fin de articular una oferta diferenciada que les permita ser competitivos y fidelizar a sus clientes. Establecer alianzas, buscar fórmulas que permitan compatibilizar diferentes modelos y trabajar de manera creativa y coordinada son obligación ineludible para quienes aspiren a dar continuidad a los negocios "de toda la vida".
Editorial
La continuidad de los negocios "de toda la vida"
11/12/11 0:00
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