Oiga…está usted ahí?

Sí, estoy pero no le oigo, se corta, se va, se fue!. Ésta parece ser la cancioncilla predomínante y que ahora, al haber aumentado el número de visitantes, está en boca de muchos y especialmente en el término de Ciutadella. Hace un par de años un ciutadellenc me contestó muy disgustado porque dije que el problema denunciado por la zona centro comercial de Ciutadella, era que faltaba cobertura y tenían que irse a no se cuantos metros de sus lugares de trabajo para poder mantener una conversación normal a través del móvil, consecuencia del desmantelamiento masivo de antenas. Al igual que "toro sentado" ese acérrimo ecologista que prefirió sacar el hacha de guerra en lugar de fumar la pipa de la paz, en busca de soluciones a medio camino entre las dos verdades, contaminación y necesidad, otras voces se sumaron convencidos de que, la mejor fórmula para comunicarse entre una urbanización y la Plaça des Pins, deberían ser las señales de humo. Pues bien ahora surgen nuevas protestas por todo lo contrario, por falta de antenas, quejas por recepción deficiente y no solo de telefonía sino también de TV. Queremos estar en primera línea, que no nos falle nada, pero sin renunciar a nada. Pues a ver en que quedamos, si nos definimos de una vez por todas. ¡Clotellada a tanta indecisión!