El poder de la risa

Hazlos reír y lo que está en el fondo podrá subir/hazlos reír y al fin verás el frente de ese perfil", va canturreando por la calle. ¿Se ha vuelto loca? No, no más de lo que ya estaba, pero ha redescubierto el poder de la risa. La tarde comenzaba con el gesto adusto en el rostro y ha bastado una conversación, entremezclada de bromas y reflexiones serias, pero más bromas, para que se disiparan los nubarrones. Soy consciente de que la situación es muy, muy seria y que habrá quien me reproche que defienda a los que tienen la virtud de encarar su día a día con buen humor pero quizás ha llegado el momento de empezar a reírse un poco más. No con esa risa floja y artificial a la que nos hemos acostumbrado sino con la franca y sincera que permite poner distancias y volverle a dar a cada cosa la importancia que realmente tiene. Priman en estos días los análisis sesudos y, sin embargo, tengo una profunda curiosidad- que por motivos laborales seguro que no será satisfecha- por saber cómo analiza el terremoto electoral Bep Moll, "Pipa", esta noche en Ferreries. Tengo también la curiosidad de saber si las formaciones en derribo son capaces de levantarse de entre los escombros reírse un poco del batacazo que se han pegado para, con la mente y el corazón limpios, reconocer que estaban envarados de poder y tan lejos de todo que no quisieron ver lo que se avecinaba.