Luis Sanz Álvarez (Licenciado en Derecho)31/03/11 0:00
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La fama, conseguida a base de tragicomedias, matrimonios por quinta o sexta vez, medias mentiras y medias verdades en sus declaraciones, apoyada por los medios de comunicación con sus entrevistas y suculentos cheques. Hacen que las tardes de este otoño muchos miles de españoles estén delante de la televisión viendo el desenlace temporal de la trama en cuestión, porque señores va a seguir... Esta serie de personas, me hacen pensar que muchas están rezando casi a diario para que les manden algún tipo de desgracia suficiente para que suene, que se extienda, como una "gran noticia", que incluso algún familiar tenga cualquier tipo de incidente o accidente, de tal forma que después del baño de lagrimas y lógicamente con mucha solidaridad por parte de otros personajillos similares pueda seguir llenando sus bolsillos, incluso en dos platós televisivos a la vez... Las tardes de otoño continuarán con este tipo de programas para que parte de nuestra sociedad pueda alimentarse de intrigas inventadas por esos de personajes y aliviando! como no! la insaciable sequedad de sus ingresos.

Este tipo de personajes, como sigamos así, perdiendo el norte, son capaces de hablar un día y de pronto sube el pan, la gasolina, y hasta los pimientos. Sí, sí señores…. pero no se preocupen que otros pensarán que les gusta la tele basura y la radio basura , no pasa nada, así que a seguir disfrutando del telecirco, que algo aprenderemos, porque incluso puede ser beneficioso para la salud, y olvidarnos de los verdaderos problemas que afectan a este país.

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