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Al Sr. Pere Navarro, director general de tráfico le ha patinado el freno. Y que conste que su apoyo por conseguir nuevas medidas para que los accidentes en carretera disminuyan son de lo más plausibles, pero ahora le ha fallado el freno y no sé muy bien si debido a lo gastado del pedal o a que pierde aceite, el freno quiero decir. Eso de que chavales de 16 años puedan conducir coche siempre que vayan acompañados (me imagino que de algún adulto), puede traer cola. Y otra cosa, ¿esos adultos tienen que ir siempre con los chavales o solo de vez en cuando?, quiero decir que si salen de juerga hasta las tantas de la madrugada, ¿los adultos también con ellos? Menuda estampa en los botellones y discotecas compartiendo trago, fumata y musiquilla con los colegas menores de edad: "Loli, vente pa ca que te voy a presentar a mi viejo que hoy viene de copiloto…" Porque el adulto copiloto no deberá obligatoriamente ser siempre el "viejo", o sea su padre, podrá ser cualquier otro adulto y adulto de confianza, no sea que secuestren al chaval y luego vete a saber a quién reclamas. En fin, no se extrañen ustedes si dentro de poco, en los cristales traseros de los coches ven que se han sustituido los conocidos avisos de "¡precaución, bebé a bordo!" por los de "!precaución, bebé al volante!".