Wikileaks y su cara visible, Julian Assange, son famosos después de haber difundido los documentos de las embajadas norteamericanas. Del fenómeno, llama la atención el contenido, pero también las cuestiones de forma, con matices interesantes. En cuanto al fondo, sorprende que los hechos descubiertos apenas hayan tenido consecuencias políticas y sociales. Eso confirma la idea de que la cantidad masiva de información no ayuda a cambiar nada, satura y no se digiere, por tanto se pierde el valor. Además, la fuente única, aunque sea de documentos oficiales, no inspira a la confianza ciega. El contraste es imprescindible. Al final queda la sensación que las historias pueden ser verdaderas, las opiniones reflejadas en los documentos tienen base y criterio, pero les falta algo, la fuerza del trabajo periodístico que permite a un documento convertirse en noticia o reportaje. La cuestión de forma tampoco es baladí. Los documentos de Wikileaks han tenido una gran trascendencia pública porque han aparecido en periódicos de papel. Su presencia solo en la red habría diluido su importancia. Confirma lo que ya sabíamos, la información en internet no tiene el peso ni la credibilidad de los periódicos. Al final, lo importante siempre es el contenido y no el envoltorio. Sin embargo, me agrada pensar que no será fácil prescindir de los periodistas.
Terra de vent
La red en los periódicos
05/01/11 0:00
También en Opinión
- Detenida una joven de 22 años por dejar morir a su bebé tras dar a luz en un inodoro en Maó
- Que esta furgoneta destartalada no se encuentre en...
- Air Nostrum cancela cuatro vuelos de la ruta de Menorca con Palma
- El perro 'menorquín' del velero que se estrelló en Formentera regresa a la Isla
- Puertos saca a concesión el restaurante del faro de Artrutx: esto es lo que cobrará cada año
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.