La portavoz del Govern balear, Joana Barceló, ha afirmado que el viaje realizado esta semana a Bruselas por una delegación de políticos y empresarios de las Islas ha sido positivo por cuanto se ha tenido la oportunidad de exponer los grandes problemas de nuestra Comunidad autónoma ante la Unión Europea. Sin embargo, no se ha logrado el objetivo esencial de esta visita: que la UE reconozca a Balears como territorio transfronterizo, un reconocimiento que posibilitaría incrementar la aportación europea.
Balears tendrá que esperar cuatro años. Así lo ha indicado la comisaria de Política Regional, Danuta Hübner. Hasta 2013 no es previsible que la UE se muestre receptiva a la solicitud balear y no se podrá contar, por tanto, con un fondo adicional que elevaría a 50 millones de euros la ayuda europea en lugar de los 15 millones que se perciben actualmente del Fondo Europeo de Desarrollo Regional.
El viaje a Bruselas de la delegación presidida por Francesc Antich suma, en fin, otra decepción al persistir las reticencias de reconocimiento europeo de las claras desventajas que comporta nuestra insularidad en el ámbito económico. Pero hay que insistir y no abandonar esta reivindicación.
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