El informe de Intervención incluido en la Cuenta General del Consell de Menorca correspondiente al 2020 revela un bajo y preocupante nivel de ejecución de las inversiones presupuestadas. En conjunto, la primera institución política menorquina solo ejecutó el año pasado el 21,4 por ciento del presupuesto destinado a inversiones, que ascendía a 22,8 millones de euros, pero si el cálculo es sobre la cantidad final, la ejecución se reduce al 18,4 por ciento.
Al incumplimiento de las inversiones se añade el incremento de los gastos corrientes y el aumento del remanente de tesorería, que ascendió a 29,7 millones de euros. Todos estos datos contables, resultado de la gestión de quienes ejercen las competencias del gobierno insular, demandan explicaciones.
En primer lugar, cuáles son las razones de tan bajo nivel de ejecución presupuestaria; y por qué el 2020 los gastos corrientes aumentaron un 9,72 por ciento respecto al 2019 y ascendieron a 58,9 millones de euros. Intervención advierte que esta tendencia de incremento del gasto corriente se debe controlar. El Consell debe demostrar su utilidad y eficacia, así como una mejor gestión de los recursos públicos que maneja y gestiona.