Cuando aún persisten las dudas sobre la delimitación final de la zonificación en Menorca -o sea, donde estará autorizado y donde no se permitirá el alquiler turístico- la oferta de esta actividad se ha trasladado a las redes sociales para burlar a los inspectores. Muchos propietarios han optado por salir de las grandes plataformas para seguir alquilando sus viviendas mientras el Govern sigue con la política de sanciones a estas plataformas comercializadoras.
El Pacte multó ayer HomeAway con 300.000 euros por ofertar alquileres turísticos irregulares en Balears. Idéntica cantidad fue impuesta Airbnb, cuyas alegaciones estudian los servicios jurídicos del Govern, mientras que el periodo de alegaciones de Tripadvisor, con la misma propuesta de sanción de 300.000 euros, sigue abierto.
Ajenos a los anuncios de estas multas, los propietarios han encontrado en el intrincado ámbito de las redes sociales la fórmula ideal para eludir el control del Govern, porque, como explica el redactor Javier Gilabert, la oferta ilegal de alquiler turístico no se crea ni se destruya, se transforma. Este año volverá a registrarse un elevado volumen de alquiler turístico en Menorca a través de otros canales.
