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Desde el 27 de octubre, cuando dejó de estar operativo el cable submarino que enlaza Mallorca y Menorca, toda la electricidad que precisa la Isla depende exclusivamente de la central térmica de Maó. Desde estas instalaciones de Endesa se genera la energía eléctrica que consume Menorca al no existir conexión con el exterior. Una avería que paralice el funcionamiento de la central de la Colàrsega dejaría a los menorquines sin energía eléctrica.

Urge, por tanto, recuperar el enlace que constituía la base del sistema eléctrico Mallorca-Menorca. La planificación estatal de la red de transporte de energía eléctrica para el periodo 2015-2020, aprobada por el Consejo de Ministros en octubre de 2015, con una inversión global que asciende a 84 millones de euros, contempla un doble cable submarino de interconexión eléctrica entre Mallorca y Menorca. Al mismo tiempo Red Eléctrica también apoya el doble enlace para evitar interrupciones y garantizar el abastecimiento eléctrico. La decisión final para la instalación de estos dos cables corresponde al Ministerio de Energía. Las instituciones deben movilizarse para exigir unas obras absolutamente necesarias para toda Menorca.