La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha citado al vicepresidente del Ejecutivo, Biel Barceló, para que aclare los motivos por los que Més per Mallorca -como también hicieron los diputados de Més per Menorca y Podemos- votaron en contra de una disposición de una Ley de Urbanismo que permite regularizar los terrenos de Platja d'en Bossa y Cala Tarida, en Eivissa.
Los objetivos de esta ley, promovida por el conseller de Territorio y Energía, Marc Pons, consisten -según el Govern- en reforzar la disciplina y proteger la vivienda pública, pero lo que ha llegado a los ciudadanos es un nuevo capítulo de discrepancias en el Pacte. Los diputados de Més y Podemos, que no habían puesto objecciones a la ley ni cuestionado la disposición, votaron en contra tras conocer unas críticas difundidas por el GOB. Al final se salvó gracias al voto a favor del PP.
Constituye una falta de rigor que haya unos políticos que, al oír el nombre de Matutes y leer mensajes en Twitter, cambien de opinión. Gobernar requiere dar soluciones, no navegar en la indefinición mientras los problemas se eternizan. Gobernar implica tomar decisiones y aplicar medidas serias y razonadas.