La Alianza Mar Blava se ha quejado ante la Comisión Europea por la demora del Gobierno en pronunciarse sobre las prospecciones y sondeos petrolíferos en aguas próximas a Balears. Estos proyectos han provocado la oposición del Govern balear, los consells insulars y los principales agentes sociales al considerar que constituyen un riesgo para el turismo y el medio ambiente de las islas.
El Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente sigue sin dar a conocer los resultados de los informes de impacto ambiental, que tienen carácter vinculante para la concesión o denegación de los permisos que permitan llevar a cabo las prospecciones. Hay cuatro peticiones pendientes de estos informes. El Govern lidera el rechazo social de Balears contra la autorización de los sondeos y la extracción de hidrocarburos, mientras que el Ministerio de Industria, su titular, José Manuel Soria, no ha ocultado el interés por la explotación de estos hipotéticos yacimientos.
El Gobierno no puede demorar su pronunciamiento, porque no tiene sentido que se siga especulando sobre una cuestión que ya ha motivado el desacuerdo de la inmensa mayoría de los menorquines.