Las exigencias contenidas en la Ley de Apoyo a los Emprendedores constituyen una severa amenaza para los clubes deportivos de Menorca, entidades modestas y sin ánimo de lucro.
La estricta aplicación de esta ley obligaría a muchos de estos clubes a dar de alta en el régimen de la Seguridad Social a sus monitores y colaboradores.
La preocupación y el malestar que esta normativa han creado en el deporte menorquín ha hallado respuesta en el Consell insular a través del escrito que el conseller de Cooperación y Deportes, Juanjo Pons, ha remitido al presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal Carro.
«Comprendemos -ha indicado el conseller Pons Anglada- la necesidad de regular el sector, pero cuando esta normativa se implante de forma definitiva debe hacerse de manera que estos clubes no tengan que temer por su viabilidad económica, dado que la mayoría del personal realiza su labor de forma voluntaria o a cambio de una dotación simbólica».
El Consejo Superior de Deportes debe atender la propuesta de un régimen especial para apoyar el deportes y las entidades deportivas de Balears. Es una petición razonada.